Cartas de inversión

Durante casi un siglo, el fabricante japonés de óptica Olympus hizo honor a su mítico nombre, sinónimo de la morada de los dioses.  Hoy, la empresa es líder mundial en óptica de precisión, cotiza en la Bolsa de Tokio y cuenta con más de 28.000 empleados.   En 2011, registró unas ventas cercanas a los 10.000 millones de dólares.   Sin embargo, ese mismo año marcó su caída en desgracia al verse involucrada en uno de los fraudes más prolongados y cuantiosos de la historia moderna, con un total de 1.700 millones de dólares.

Con la Bolsa de Tokio fomentando que las empresas mejoren su gobierno corporativo en los últimos años, consideramos el fraude de Olympus un caso de estudio valioso para el análisis. Aunque Comgest no tenía posiciones en la compañía en 2011, creemos que las lecciones extraídas de este caso pueden aportar información relevante para nuestras futuras decisiones de inversión. Para identificar oportunidades de crecimiento de calidad alineadas con el enfoque de inversión de Comgest, nuestro equipo de inversión se dedica a realizar un análisis bottom-up con el máximo rigor. Nuestro análisis a largo plazo demuestra que evaluar erróneamente la calidad puede resultar mucho más costoso que subestimar el crecimiento. Así como aprendemos de nuestros propios errores, creemos que es igualmente importante aprender de los desaciertos ajenos.

Leer más